El PP reprocha a la Junta (PSOE-C’s) el año perdido en la construcción del hospital Fuengirola-Mijas

Un año después de que el entonces consejero de Salud anunciara que retomaba el proyecto, gracias a la insistencia de la diputada popular Oña, éste ha sufrido un nuevo parón

Los populares también critican el poco entusiasmo y disposición mostrados por el tripartito en este asunto, ya que no terminan de poner a disposición de la Junta una parcela


Mijas, 4 de octubre de 2017.
El presidente del Partido Popular de Mijas, Ángel Nozal, ha reprochado hoy a la Junta de Andalucía el nuevo parón que experimenta el proyecto del hospital Fuengirola-Mijas, una infraestructura prometida por el entonces presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves (PSOE), en las elecciones municipales del año 2003, esto es, hace ya catorce años.

“Hace un año que el entonces consejero de Salud, Aquilino Alonso (PSOE), dijo públicamente que la Junta estaba dispuesta a retomar el proyecto. Ha pasado un año, hay una nueva consejera, y todo está igual que hace catorce años. No hay nada. No queremos creer que las palabras del entonces consejero fueron una nueva falsa promesa, pero después de un nuevo año perdido, y ya van catorce, empezamos a creerlo”, dijo.

Hace doce meses, los responsables autonómicos aseguraban que la infraestructura dispondría de una cartera de servicios conformada por 18 especialidades; Medicina Interna, Aparato Digestivo, Cardiología, Neumología, Dermatología, Cirugía General y Digestiva, Oftalmología, Otorrinolaringología, Rehabilitación y Medicina Física, Urología, Traumatología y Cirugía Ortopédica, Tocoginecología, Anestesia y Reanimación, Urgencias Generales Hospitalarias, Diagnóstico por la Imagen, Biotecnología, Farmacia Hospitalaria y Medicina Preventiva y Salud Pública.

En lo que lo que se refiere a las áreas de atención del futuro hospital, según relataba entonces el propio consejero, éste contaría con Área de Consultas Externas y Exploraciones Especiales, Área de Urgencia, Quirúrgica, de Hospitalización Polivalente (con habitaciones individuales), de Rehabilitación y Fisioterapia, Laboratorios, Diagnóstico por la Imagen, Farmacia Hospitalaria, Atención a la Ciudadanía, Servicios Generales y de Dirección y Administración.

Por aquel entonces, el máximo responsable de la Sanidad andaluza hablaba de esta inversión como “de máxima prioridad” y mostró su interés firme de establecer un cronograma para iniciar las obras lo antes posible. Faltaba, eso sí, unos terrenos donde poder erigirlo.

“Y así seguimos. Sin que el Ayuntamiento haya puesto a disposición de la Junta unos terrenos donde poder hacer el hospital que ahora sí parece dispuesto a hacer. Tampoco sabemos si la nueva consejera mantiene las intenciones de Aquilino Alonso. En algo que es de tanto interés social para nuestros vecinos, es necesario que la Junta deje claras sus intenciones”, manifestó Ángel Nozal.

 

Una larga historia

En 2003 el Partido Popular de Fuengirola comenzó una recogida de firmas para dar a conocer la necesidad de que la zona de Fuengirola y Mijas contase con un centro hospitalario a causa de su gran volumen de población. Se recogieron más de 20.000 apoyando esta propuesta.

Ante este movimiento ciudadano, el ex presidente de la Junta, Manuel Chaves, se comprometió en un acto electoral ese mismo año a que el Centro Hospitalario de Alta Resolución (Chare) Fuengirola-Mijas sería una realidad. El Consistorio fuengiroleño ha puesto todo de su parte para hacer realidad el proyecto, pues incluso cedió unos terrenos de 23.000 metros cuadrados, en 2004, en la zona de La Loma para ubicar el hospital, los cuales fueron rechazados.

Un año después, en 2005, la antigua consejera, María Jesús Montero, vino a Mijas para firmar un convenio con el exalcalde socialista, Agustín Moreno, y construir este centro. Se trató en realidad de un protocolo de intenciones, ya que los terrenos donde se planteaba no eran de propiedad municipal, sino privados y estaban pendientes del desarrollo urbanístico.

El nuevo centro sólo se puede calificar como necesario, pues serviría para ofrecer asistencia a las más de 150.000 personas de los dos municipios costasoleños, una población que se llega a duplicar y hasta triplicar en el periodo estival.